Edición Bimestral No. 4
Año 1
Editorial
A finales del siglo XIX, Colombia detectó la promulgación de dos importantes Constituciones. Una, la de Rionegro, sancionada el 8 de mayo de 1863 y famosa por haber reconocido “las libertades y los derechos individuales absolutos, ilimitados e irrestrictos”. Otra, la de 1886, llamada el “acta de la reconstrucción”, trascendental por haber consagrado derechos civiles y garantías sociales “razonablemente limitados” por la moral cristiana, las leyes y el orden público.
